40. 13ª ETAPA: KRASNORYASK - TULUN - IRKUTSK

Hoy ha sido una etapa larga pero productiva. Entre ayer y hoy he avanzado mucho, a pesar de las dificultades. Si todo sale como tengo previsto el Sábado entraré triunfante en Ulan Bator, pues estoy ya a menos de 2.000 kilómetros. Espero que haya alguien de la organización esperándome allí. Os recuerdo que el lema de este Rally es, precisamente: “Arréglatelas como puedas”, ¿simpáticos, no?

Me siento como Marco Polo, tan cerca ya de Mongolia que me produce cierta ansiedad. No dejo de encontrarme todo tipo de gente y a cuál más peculiar. En la jornada de ayer conocí a unos americanos que se llaman a si mismos "The Stupids", y que viajan de Vladivostok a Porto en bicicleta, piensan estar casi un año en la carretera a razón de 120 Kms. al día; me dieron una tarjeta para que visitara su página web. Habrá que verla.

Tulun

La carretera, por llamarle algo, es fatal, cada vez peor. Hay tramos que parecen no existir y hay que adivinar por dónde tirar. El coche está ya más cansado que yo. Se volvió a pegar la pastilla del freno a la rueda delantera derecha. Si, ya sé que prometí arreglarla si me volvía a ocurrir, pero la verdad es que, para lo que queda, me da mucha pereza. Y mientras vaya funcionando, así, a martillazo limpio. ¡Hombre, si hay que arreglarlo se arregla, pero arreglar pa ná…! Para colmo un camión que circulaba delante de mí, me lanzó una piedra y me ha roto el parabrisas. Espero que aguante así, cuarteado, hasta el final, porque no creo que por aquí encuentre un “Arevalillo”, aunque nunca se sabe, jajaja.

Ya estoy en Irkutsk, al pie del lago Balkai. Es un sitio mítico, aquí se rodó parte de la película de la que hablábamos ayer, sobre el Transiberiano. A Irkutsk, le llaman el Paris de Siberia, porque se formó un grupo de intelectuales a base de literatos y artistas exiliados y deportados por el zar. Pero ahí se acaba todo el parecido con la ciudad de la Luz. Irkutsk, a pesar de ser la capital de Siberia, pareciera un poblado semi abandonado del lejano oeste. En realidad me gustaría deciros que todo esto es muy bonito y tal; y que la gente es maravillosa, bla, bla, bla. Pero la cuestión es que está lloviendo, y eso no ayuda a la contemplación placentera del paisaje. Y la gente, la verdad, aunque se ríe más que en el resto de Rusia, parecen un poco desnortadas. Quieren hablar inglés y no les da vergüenza ni miedo el decirlo, y escuchan a Shakira, y comen hamburguesas del McDonald's. Creo que están perdiendo la identidad cultural a marchas forzadas.

Otra cosa es el cercano y mítico lago Baikal, a unos 80 Km. de Irkutsk. El lago está más o menos a mitad de camino entre Vladivostok y Moscú, y a uno 5.200 Km. de la capital, justo encima de Mongolia. El lago mide aproximadamente unos 1.000 Km. de largo, es el más grande el mundo, y atesora el 20 % de las reservas de agua del planeta, con una fauna única. Ojala que se conserve. Para los rusos es una especie de parque turístico y he oído que van allí a pasar el día con la barbacoa y esas cosas… Vamos, como los españoles a La Manga. Dice la tradición que si sumerges allí las manos, tendrás un año más de vida, no sé.

Bueno, no os cuento más cosas turísticas, que supongo que ya estáis deseando que termine mi aventura para poder iros vosotros también de vacaciones, que mañana es el último día de julio. ¡Paciencia, ya queda poco! jajaja. Besos a todos, de nuevo.

Irkutsk

Y aquí os dejo un vídeo para que veáis lo que es un puente... ¡Aquí me gustaría ver a mí a Indiana Jones!